Pablo Lopez Polanco's Obituary
Pablo Bienvenido López Polanco (27 de noviembre de 1940 - 8 de octubre de 2023) vivió una vida basada en principios y centrada en la familia. Un esposo y padre devoto y un hombre de Dios, lo dio todo por su familia y pidió poco a cambio. Su esposa, Crescencia, lo adoraba y juntos enseñaron a sus hijos, Edwing, Franklin, Pablo, Atalia y Kenia, integridad, valor y perseverancia, dándoles el carácter fundamental necesario para vivir la vida con propósito y resiliencia.
Creciendo en circunstancias muy humildes, Pablo fue un aprendiz disciplinado que vivió “midiendo dos veces y cortando una vez”. Todo lo que se esforzó por hacer lo hizo meticulosa y hábilmente. Tenía la capacidad de construir o arreglar casi cualquier cosa. Cuando era joven, aprendió a construir casas desde cero, incluida la lectura de planos arquitectónicos, albañilería, plomería y electricidad. Sus propias manos construyeron las dos casas que la familia llamaba hogar.
Disfrutaba cazar aves silvestres en el campo de la República Dominicana. Construyó escondites de camuflaje y era experto en utilizar señuelos vivos para atraer a la presa. En varias ocasiones llevaba consigo a uno de sus hijos a cazar. La caza era un momento de concentración, un momento para volverse uno con la naturaleza, un momento en el que su naturaleza tranquila se mezclaba perfectamente con su medio ambiente.
Después de convertirse en miembro de la iglesia mormona, disfrutaba escuchar himnos instrumentales de la iglesia y cantar las letras de canciones cristianas. Sirvió a su iglesia local en muchas capacidades, incluido el de maestro de escuela dominical, ministrando a diferentes grupos de la iglesia hasta convertirse en el líder de la iglesia local. Amaba su fe y adorar a Dios mientras trabajaba en el templo. Miembro devoto de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, le encantaba leer las Escrituras, dirigir eventos de la iglesia e ir al templo. “Pablito”, como lo llamaba su esposa, era un caballero que se concentraba en cuidar a su familia, a veces excluyendo sus propias necesidades. Creía en la santidad del matrimonio y fue sellado por tiempo y por toda la eternidad a su encantadora esposa en el templo de Timpanogos en Utah.
Si bien “Papi”, como lo llamaban sus hijos, era un hombre muy serio y ecuánime, en ocasiones hacía reír a toda su familia con sus chistes arraigados en las vivencias generacionales del campo dominicano. Muchos lo amaban por su generosidad ilimitada con su tiempo, sus talentos y sus posesiones.
Todos aquellos que dejó atrás extrañarán profundamente a Pablo. Nos duele el corazón por esta pérdida. Él era único. Tener su amor silencioso pero constante era una verdadera bendición.
Los servicios conmemorativos se llevarán a cabo en Trinity Memorial Funeral Home (12609 Memorial Dr., Trinity, FL 34655) el 14 de octubre a las 10 am.
Pablo Bienvenido Lopez Polanco (November 27, 1940 – October 8, 2023) lived a principle-driven, family focused life. A devout husband and father and a man of God, he gave his all to his family while asking little in return. His wife, Crescencia, adored him and together they taught their children, Edwing, Franklin, Pablo, Atalia and Kenia, integrity, grit and perseverance, given them the foundational character necessary to pursue life with purpose and resiliency.
Growing up in very humble circumstances, Pablo was a disciplined learner who lived by “measured twice cut once.” Everything he endeavored to do he did meticulously and adeptly. He had the capacity to build or fix almost anything. As a young man, he learned how to build houses from the ground up including reading architectural blueprints, masonry, plumbing, and electric work. His own hands built the two houses that the family called home.
He enjoyed hunting for wild birds in the countryside of the Dominican Republic. He built camouflage hideouts and was adept at using live decoys to allure males. On several occasions, he would take one of his sons hunting with him. Hunting was a time of concentration, a time to become one with nature, a time when his quiet nature blended seamlessly with the surroundings.
After becoming of member of the mormon church, he enjoyed listening to instrumental church hymns and singing the lyrics of Christian songs. He served his local church in many capacities including being a Sunday school teacher, ministering to different church groups until becoming the leader of the local church. He loved his faith and adored worshiping God while doing temple work. A devout member of the Church of Jesus Christ of Latter-Day Saints, he loved reading scriptures, leading church events, and going to the temple. “Pablito,” as he was called by his wife, was a gentleman who was focused on providing for his family, sometimes to the exclusion of his own needs. He believed in the sanctity of marriage and was sealed for time and all eternity to his lovely wife in the Timpanogos temple in Utah.
Though “Papi,” as he was called by his children, was a very serious and even-keel man, occasionally, he made his whole family laugh with his jokes rooted on the generational experiences of the Dominican countryside. He was loved by many because of his unbound generosity with his time, his talents, and his possessions.
Pablo will be deeply missed by all those that he’s left behind. Our hearts ache by this loss. He was one of a kind. Having his quiet but constant love was to be truly blessed.
Memorial services will be held at Trinity Memorial Funeral Home (12609 Memorial Dr, Trinity, FL 34655) the 14 of October at 10 am.
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